La cancha de fútbol es el escenario principal de esta divertida historia, donde sus protagonistas no sólo defenderán su orgullo, sino también aprenderán a enfrentar la vida, unidas, bajo el desafío que el juego les ofrece. El balón les permitirá conquistar sus metas y sabrán llevar la camiseta de su equipo muy bien puesta, buscando trascender, avanzar, ser campeonas en un mundo donde ganar lo es todo.

Lorena, Paulina, Daniela y Fernanda, a sus 17 años, se saben unidas por un lazo de amistad tan fuerte que lo supera todo y las convierte en inseparables, aún en los momentos más difíciles que cada una de ellas deberá enfrentar durante su último año de preparatoria.

Son cuatro historias de amor, salpicadas de encuentros y desencuentros, de dulces ilusiones pero también de amargas intrigas y dolorosas verdades que deberán enfrentar estas jovencitas, para hacer valer sus sentimientos dentro de un entorno adolescente que pretende comerse el mundo a mordidas...

La vida de estas cuatro chicas, pero en especial de una de ellas se entrelazará con la de Juan Carlos, el galán de la historia, un hombre con muchos ideales, pero cuyo valor principal es la familia, para la que trabaja y defiende incansablemente.

Entretejidos en la historia encontramos a una gran variedad de personajes: los amigos incondicionales; la chica popular y superflua; la hija adoptiva malagradecida; el hermano rencoroso y desubicado; el chico tímido enamorado sin esperanza de la niña extrovertida; el bohemio que no ha superado la pérdida del primer amor; la chismosa; el bromista; el ambicioso dispuesto a lo que sea para arrebatarle una fortuna a su propio hermano; el anciano entusiasta que entrena a un equipo de fútbol a base de sabios consejos.

Todas estas situaciones sólo conseguirán reforzar en los jóvenes su entusiasmo y la determinación de defender el derecho a vivir su propia vida. Sin embargo, pronto descubrirán que para ser campeones y conseguir sus metas, no basta desearlo; deben aprender a luchar y entregar el corazón por lo que quieren... ¡Ese es el verdadero Juego de la Vida, un partido que tendras que ganar!